Hola equipo de psicólogos,
Espero que estén bien. Últimamente he escuchado mucho sobre el coaching como una herramienta para el desarrollo personal y profesional. Me genera mucha curiosidad, pero también algunas dudas que me gustaría compartir, especialmente porque como persona con discapacidad sensorial prefiero enfoques claros, estructurados y con bajo nivel de carga perceptiva para poder procesar mejor la información.
He visto en redes sociales y en internet a muchas personas que se presentan como ‘coaches’ ofreciendo acompañamiento para mejorar aspectos de la vida, desde la productividad hasta la autoestima o la gestión emocional. Sin embargo, me cuesta diferenciar cuándo un coach realmente puede ayudarme y cuándo debería buscar mejor a un psicólogo clínico. ¿Cómo puedo distinguir los límites entre ambas profesiones? ¿Un coach sin formación en psicología puede trabajar temas emocionales de manera segura o efectiva?
En mi caso, estoy en una etapa donde quiero entender mejor mis objetivos personales y profesionales, pero sin sentirme sobrecargado por información o presión externa. ¿El coaching puede adaptarse a una persona con alta sensibilidad perceptiva como yo? ¿Qué tipo de metodología deberían mencionar o usar para que la experiencia sea accesible y respetuosa con mis necesidades sensoriales?
También me interesa saber su opinión como profesionales acerca de qué debería tener en cuenta antes de decidirme por un proceso de coaching. ¿Hay señales de alerta para identificar si el profesional no está calificado? ¿Qué tipo de formación o código ético debería seguir un coach serio?
Agradezco mucho el espacio para preguntar y espero que puedan orientarme. Me ayudaría también si pueden recomendar recursos accesibles sobre este tema.
Muchas gracias.