Lamento mucho que estés pasando por un momento tan difícil. Los recuerdos traumáticos pueden afectarnos profundamente y muchas veces se presentan sin previo aviso, alterando nuestro día a día y nuestra capacidad para disfrutar el presente. Lo que estás sintiendo es completamente válido, y no estás solo en esto.
Buscar herramientas para sentirte mejor ya demuestra una gran fortaleza de tu parte. A veces, nuestro cuerpo y mente reviven el trauma como si todavía estuviéramos en ese momento, lo que puede generar ansiedad, tristeza o una desconexión con la realidad actual. En estos casos, conversar con un psicólogo o terapeuta especializado en trauma puede ser muy útil. Con su apoyo, podrías aprender a reconocer y manejar esos recuerdos de una manera más amable contigo mismo, permitiéndote ir poco a poco recuperando tu bienestar.
Te animo a que des ese paso hacia la ayuda profesional. No hay nada de malo en necesitar apoyo: todos lo hacemos en algún momento. Existen terapias muy efectivas, como la terapia cognitivo-conductual o la terapia EMDR, que han ayudado a muchas personas a superar experiencias parecidas. Hay una salida, y merece la pena intentarlo. Tú mereces estar bien.